Cuidar de nuestro corazón es imprescindible ya que, según la Sociedad Europea de Cardiología, las enfermedades cardíacas son la principal causa de muerte en la Unión Europea, con 2 millones de defunciones anuales. Del mismo modo, la Fundación Española del Corazón también señala que gran parte de los factores de riesgo de las enfermedades cardiovasculares se pueden controlar con patrones dietéticos apropiados como el consumo de alimentos ricos en fibra y en Omega-3, que contribuyen a reducir la presión arterial y el colesterol.
Por lo tanto, para mantener una dieta saludable que cuide de nuestro corazón debemos comer de forma variada e incluir en nuestras comidas alimentos beneficiosos para nuestro corazón, como las verduras, frutas y frutos secos, en especial, las nueces.
Y es que, si hablamos de Omega -3, las nueces son el aliado perfecto, ya que son el único fruto seco fuente de ácidos grasos de origen vegetal que el cuerpo necesita, pero no puede producir. En definitiva, se trata de un alimento único entre los frutos secos gracias a su composición de nutrientes esenciales que las define como un alimento óptimo para la salud cardiovascular. Así, un puñado de nueces al día ayuda a reducir los niveles de colesterol malo e hipertensión, ambos factores de riesgo de las enfermedades del corazón1.
Además, si queremos reducir el consumo de carne y así hacer más variada y rica nuestra dieta, las nueces son el sustito ideal de la carne y de otros alimentos de origen animal, ya que estas aportan proteínas, concretamente un puñado de nueces (un puñado de 30 g al día) contiene 4,6 g de proteína. Por ejemplo, podemos incluir esta porción de nueces en platos hechos a base de plantas como esta pasta de ragú de nueces y champiñones o esta pizza BBQ vegana de nueces, ya que sus componentes reemplazan directamente las grasas saturadas por las no saturadas.
