Las pautas alimentarias de los principales países coinciden en recomendar frutos secos, entre ellos las nueces, por su implicación en una dieta de mejor calidad. Esta ha sido una de las conclusiones discutidas en el marco del Congreso internacional NUTRIMAD, Nutrición Comunitaria en el siglo XXI, organizado por la Sociedad Española de Nutrición Comunitaria (SENC), que reúne a más de 450 profesionales de la salud de todo el mundo en Madrid, del 24 al 27 de octubre.
La dietista-nutricionista Carol Berg Sloan, directora de investigación en salud de la California Walnut Commission (CWC), ha presidido una sesión centrada en las últimas actualizaciones de las guías dietéticas actuales. Estas guías fomentan un patrón de alimentación saludable haciendo hincapié en alimentos altamente nutritivos e incorporan una variedad de fuentes de proteínas, incluyendo las vegetales como frutos secos. La conferencia se ha focalizado en las recomendaciones sobre el consumo de los frutos secos, destacando las nueces como alimento básico de la dieta mediterránea y especialmente recomendadas para la prevención de enfermedades del corazón.
Así lo reconoce la Unión Europea, que ha aprobado una declaración de propiedades saludables exclusiva: “las nueces contribuyen a mejorar la elasticidad de los vasos sanguíneos, si se consume la ración diaria recomendada de 30 gramos”. Y es que hace tan solo unas décadas las recomendaciones dietéticas centradas en la salud del corazón evitaban incluir frutos secos debido a su enfoque en la dieta reducida en grasas. “Hoy la evidencia científica demuestra que su composición única de nutrientes esenciales puede ayudar a reducir el colesterol y mejorar la función arterial” afirma la directora de investigación en salud de la CWC.
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La California Walnut Commission, que investiga los beneficios de las nueces desde hace 25 años, continúa sus esfuerzos destinados a mejorar la comprensión del rol de este fruto seco en ámbitos como el control de peso, cáncer, salud del corazón, diabetes, salud cognitiva, salud reproductiva, síndrome metabólico, salud intestinal, y muchas otras.
Las nueces son un alimento denso en nutrientes que forma parte de una serie de patrones alimenticios saludables. Además, son el único fruto seco con una cantidad significativa de AAL, los ácidos grasos Omega-3 de origen vegetal (2,5g), que el cuerpo necesita, pero no puede producir.
Para obtener más información sobre la investigación en torno a este fruto seco, los participantes del congreso tendrán acceso a la guía de nutrición para profesionales de la salud, así como también a un material sobre la investigación científica que prueba los múltiples beneficios de las nueces. Asimismo, la dietista-nutricionista invita a los profesionales de la salud a recomendar nueces en la dieta como una estrategia que podría servir para mejorar la calidad de la dieta de sus pacientes.
